Entonces, ¿qué es el malware avanzado y cómo trabaja?
Como el nombre lo indica, el malware es un software diseñado para infectar los ordenadores y realizar numerosas acciones nocivas. Tras explorar las vulnerabilidades técnicas o humanas en el entorno, el atacante instala y ejecuta un malware para afectar los ordenadores de los usuarios con el fín de robar información y/o impedir el acceso a los datos y a los sistemas. Las soluciones de antivirus (AV) se introdujeron para combatir los archivos de malware conocidos identificándolos mediante el uso de diferentes patrones que denominamos firmas. Aunque estas soluciones son todavía útiles para prevenir cierto umbral de malware básico con rapidez, son insuficientes para detectar las muestras de malware avanzado y evasivos más comunes que encontramos en la actualidad, ya que dependen de los humanos o de sistemas automatizados para, encontrar, analizar y actualizar bases de datos de firmas de malware.
El malware moderno se adapta más fácilmente que nunca y puede cambiar la apariencia para evadir la detección de firmas. Mediante el uso de métodos que los hackers llaman “empaquetado y encriptado”, estos pueden cambiar los archivos de malware a nivel binario de manera repetida, lo que hace que tenga un aspecto diferente para los software antivirus. Aunque el ejecutable maligno sigue teniendo el mismo efecto, tiene un aspecto diferente, lo que hace que los productos AV no detecten un malware que previamente conocían. Con cientos de millones de nuevas variantes de malware que se descubren por año, los antivirus que se basan en firmas simplemente no pueden mantener el ritmo.